IMPERIO ROMANO

El Imperio Romano es el periodo que va desde la fundación de Roma en el año 753 a.C. hasta el año 1453 d.C. fecha en la cual se produce la caída del Imperio Romano de Oriente.
Así podemos dividir el Imperio Romano en las siguientes etapas:
Fundación de Roma. Monarquía → 753 a.C. – 509 a.C.
República Romana → 509 a.C. – 27 a.C.
Imperio Romano → 27 a.C. – 1453 d.C.
Separación del Imperio Romano entre Oriente y Occidente → 395 d.C.
Caída del Imperio Romano de Occidente → 476 d.C.
Caída del Imperio Romano de Oriente → 1453 d.C.

FUNDACIÓN DE ROMA
Fundación de Roma

Los orígenes del Imperio Romano y de su capital Roma están envueltos en un círculo de mitología y leyenda. Según datos Roma fue fundada el 21 de Abril de 753 a. de C.
Las dos leyendas principales son la de Rómulo y Remo y la de Eneas que se complementan entre sí.

RÓMULO Y REMO

Alba Longa era un pequeño reino situado en la península itálica, Numitor era el rey de esta región pero fue expulsado de la misma por su hermano pequeño Amulius que pretendía el trono. Amulius asesinó a los hijos de su hermano, herederos al trono y obligó a su hija Rhea Silva a convertirse en una virgen doncella al servicio de los dioses.
Marte, el dios de la guerra romano se enamoró de Rhea Silva y el resultado fue el nacimiento de dos hermanos gemelos, Rómulo y Remo. Amulius para deshacerse de los gemelos los puso en una cesta sobre el río Tíber. Una loba (animal sagrado del dios Marte) los acogió y los crió hasta que un pastor los encontró y se los llevó a su mujer que había perdido recientemente a su bebé y crió a Rómulo y Remo.

Una vez se hicieron adultos, conocieron la historia de sus orígenes decidieron crear un ejército y marchar hacia Alba Longa donde derrotaron a Amulius y permitieron a Numitor volver al trono.

Rómulo y Remo se propusieron levantar una nueva ciudad en las cercanías del lugar donde habían sido encontrados por la loba. En esa zona había dos colinas y cada hermano propone una para construir la ciudad sobre ella. Rómulo apuesta por la colina del Palatino y Remo por el Aventino. Para decidir sobre cual fundar la ciudad se encomendaron a los dioses y ambos se subieron cada uno a su colina a la espera de una señal divina que anunciara que la suya era la vencedora.

Remo divisó 6 enormes buitres pasar por su colina y pensó que esa fue la señal y fue a anunciar a su hermano la victoria. Rómulo por su parte había divisado 12 de estas aves y comenzó a trazar un enorme foso circular que sería el límite sagrado de la nueva ciudad y anunció que daría muerte a todo aquel que lo atravesara. Remo enfurecido cruzó el límite desafiando y Rómulo asesinó a su hermano cumpliendo su promesa.

RAPTO DE LAS SABINAS
Fundación de Roma Rapto de las Sabinas

Así pues la ciudad se situó en la colina del Palatino por la gracia de los dioses, y fue poblada en su inicio con bandidos y vagabundos expulsados de las ciudades vecinas y se formó el denominado pueblo latino. Sin embargo, este nuevo asentamiento necesitaba de mujeres para su evolución por lo que se trató de raptar a las mujeres del pueblo sabino, lo que se conoce como el Rapto de las Sabinas.

El rapto conduciría a una guerra, sin embargo esta no se llegó a producir sino que se pactó la paz y los pueblos latinos y sabino se unieron para formar la población romana, más tarde los etruscos se adhirieron a estos.

LEYENDA DE ENEAS
Huida de Eneas de Troya
El mito de Rómulo y Remo es el más conocido de la fundación de Roma, sin embargo en los días del Imperio Romano, otra historia tenía más popularidad entre los ciudadanos, incluso tenía un poema que la describía, Virgilio el Eneano que se convirtió en el poema más famoso de la era Romana.

Eneas era un valeroso soldado considerado héroe de las batallas entre griegos durante la Guerra de Troya. Hijo de Venus y de padre humano, fue capaz de escapar de la ciudad de Troya tras la quema y saqueo de esta. Tras una odisea, Eneas llegó a la zona del Lacio por donde pasa el río Tíber.

Se casó con la hija del rey Latinus que era pretendida por el rey Turnus de Rutili, como es típico en los poemas épicos, ambos pretendientes dieron lugar a una guerra por conquistar a la princesa. Gracias al apoyo del rey Tarchon etrusco, Eneas logró la victoria y el favor de la princesa.

El saqueo de Troya tuvo lugar aproximadamente cerca de 1.220 a. de C. Los años entre leyenda de Eneas y la de Rómulo y Remo se rellenan con una serie de reyes ficticios para que la historia funcione y exista una conexión entre Ascanius, hijo de Eneas y Numitor, abuelo de Rómulo y Remo.

REALIDAD DE LA FUNDACIÓN DE ROMA

Las anteriores son las teorías mitificadas sobre la fundación de la ciudad de Roma. En la realidad, Roma fue fundada rodeada de 7 colinas en el 753 a. de C. como una coalición o unión de los pueblos sabino, latino y etrusco.

La región de la Lazio por aquella época estaba saturada de poblaciones independientes que competían y luchaban entre sí. El pueblo Latino y el Sabino decidieron unirse para ser más fuertes frente al resto. A esta unión se adhirió más tarde el pueblo Etrusco creando un reino mucho más avanzado que el resto, fue capaz de someter a las poblaciones vecinas y expandirse cada vez más hasta llegar a la Roma por todos conocida.

MONARQUÍA DE ROMA
El periodo monárquico de Roma fue reinado por un total de 7 reyes divididos en dos grupos. Los reyes latinos y sabinos o reyes legendarios y los reyes etruscos o reyes históricos de la familia de los Tarquinos.

REYES LATINOS Y SABINOS
Cuatro fueron los reyes latinos o sabinos que gobernaron Roma. Se les suele denominar reyes legendarios. Según narra la historia, Rómulo fundó Roma cuyos habitantes eran denominados latinos, y tras el rapto de las sabinas y la guerra entre latinos y sabinos, la paz arreglada entre ambos pueblos consistió en unirse para ser un poblado más fuerte.

Rómulo – 753-715 a.C.
Primer rey de Roma, gobernó desde 753 hasta el 715 a. de C. De acuerdo con la “Historia de Roma”, Rómulo que era latino, pobló Roma con fugitivos de otras regiones y tras la guerra con los sabinos pacta la paz con ellos repartiéndose el poder y las mujeres. Tatio y Rómulo compartieron el poder durante un tiempo hasta que el primero fue asesinado quedando Rómulo como único rey de Roma.

Su reinado duró 38 años y durante este tiempo desarrolló el primer ejército de Roma con el que trató de expandir los territorios romanos. Creó algunas instituciones típicamente romanas, los patricios, la clase ciudadana y las bases para el Senado Romano.

Numa Pompilio – 715-673 a.C.

Primer rey sabino, gobernó durante cerca de 40 años durante los que trajo paz y prosperidad a Roma. Un rey descendiente del asesinado Tatio. Es considerado el fundador de la religión romana y creador de numerosos templos y sitios de culto a los dioses. Organizó la ciudad en distritos administrativos y creó los primeros gremios de trabajadores y dividió el año en 12 meses. Fue un rey pacífico, Falleció por causas naturales.

Tulio Hostilio – 673-641 a.C.

Sucesor de Pompilius y de origen latino, gobernó entre 673 y 641 a.C. Hostilio era justamente lo contrario que su predecesor, organizó el Ejército romano y lo llevó a la guerra frente a Alba Longa, la ciudad más importante del Lacio, a la que finalmente conquistó ampliando así el territorio romano.

Su carácter guerrero y su rechazo a los dioses de Roma, unido a la plaga que arrasó la ciudad durante su reinado, hizo que un grupo de nobles de la ciudad descontentos con su mandato lo asesinaran.

Anco Marcio – 641-616 a.C.

Nieto de Numa Pompilio asesinó a Tulio Hostilio, apodado el constructor, su reinado se caracterizó por una época de construcción y expansión territorial hasta el mar. Considerado el creador de la clase plebeya ciudadana, el puerto de Ostia y el primer puente sobre el Tíber.

Combinó una gran capacidad administrativa con logros militares absorbiendo diversas tribus latinas. De igual manera que su abuelo, falleció por causas naturales.


REYES ETRUSCOS

Tarquinio Prisco – 616-578 a.C.

El primer monarca etrusco, encargado del cuidado de los hijos de Anco Marcio, envió a estos al exilio tras la muerte de su padre. El primer rey en realizar un discurso ante el pueblo pidiendo su proclamación como rey que al final consiguió. Para celebrarlo y contentar a los ciudadanos romanos inauguró el Circo Máximo organizando los primeros juegos romanos. Esta costumbre no se interrumpió desde entonces. Además de ganarse el favor de la plebe, Prisco mejoró Roma tanto administrativa como militar y estructuralmente. Conquistó nuevas tribus y desarrolló el ejército llenándolo de simbolismos. Creó el Senado.
Con el fin de evitar la aparición de nuevas plagas construyó la Cloaca Máxima que llevaba los deshechos de la ciudad al Tíber, además creó calles e instituciones públicas convirtiendo a Roma en una verdadera ciudad. Finalmente murió en el 578 a.C. a manos de los hijos de Anco Marcio.

Servio Tulio – 578-534 a.C.

De origen humilde, hijo de una esclava y criado en el palacio de la familia Tarquinio, alcanzó el poder gracias al apoyo de Tunaquil, mujer de Prisco. Rey durante más de 40 años, querido y respetado por los ciudadanos de Roma.

Desarrolló la ciudad con nuevas construcciones y permitió la evolución política y social de Roma. Construyó la Muralla Serviana para proteger la ciudad, impulsó el comercio y la industria, reorganizó las clases sociales dando poder a aquellos que se lo ganaran por méritos propios aunque fueran de orígenes humildes. Fue asesinado por su hija Tulia y su marido Tarquinio.

Tarquinio el Soberbio – 534-510 a.C.

Séptimo y último rey de Roma, asesino de Servio Tulio. Bajo su mandato, los etruscos se encontraban en la cima o momento máximo de poder y la autoridad del monarca era absoluta. Abolió diversas reformas constitucionales realizadas por sus predecesores e impuso sus decisiones por medio de violencia y asesinatos. Su tiránica actitud mantuvo descontentos a los romanos durante todo su mandato hasta que el secuestro de Lucrecia, una patricia (clase alta romana) a manos del hijo del rey fue el desencadenante de una revolución liderada por Lucio Junio Bruto y Lucio Tarquinio Colatino.

En el 510 a.C. la revolución acabó con Tarquinio el Soberbio y el senado decretó que Roma jamás volvería a ser gobernada por reyes. Daba comienzo la República Romana.

REPÚBLICA ROMANA

La República Romana es el periodo comprendido entre la Monarquía y el Imperio Romano. Durante la República, Roma se gobernó por medio del Senado y se expandió enormemente confirmándose como una potencia mundial tras derrotar a su principal enemigo en el Mediterráneo; Cartago, en las Guerras Púnicas. Repasamos los principales acontecimientos de la República, el desarrollo de las Guerras Púnicas y como fue la crisis que produjo la caída de la República.

Tras la mitificada fundación de Roma y un periodo dominado por la monarquía en la que la ciudad fue gobernada por 7 reyes, con la caída de Tarquinio el Soberbio, se instauró en el 509 a.C. la república romana. Este nuevo régimen de gobierno se extendió hasta el 27 a.C. cuando surgieron inestabilidades sociales y políticas que desembocaron en guerras civiles que propiciaron la aparición de la Roma Imperial.

Tras la monarquía, la República pretende repartir el poder entre los ciudadanos, para ello se creó una compleja red de instituciones políticas y sociales para repartir aparentemente el control gubernamental, que en realidad estaba concentrado sobretodo en el senado. Este falso poder repartido y las enormes diferencias entre las dos clases sociales (patricios y plebeyos) fueron los detonantes de la revolución que acabó con la República Romana.

El periodo de más de 450 años que dura la república es la época en la que Roma alcanza su mayor esplendor y poderío. Lleva a cabo una enorme expansión territorial marcada sobre todo por la lucha por el control del mediterráneo con los cartagineses.

NACIMIENTO DE LA REPÚBLICA

De acuerdo con los documentos escritos por el historiador romano Tito Livio, el secuestro de Lucrecia patricia de clase alta fue el detonante de la revolución que acabó con el reinado de Tarquinio el Soberbio, el último rey de Roma en 510 a.C. La violencia y tiranía con la que el rey etrusco gobernó Roma y la abolición de ciertas reformas sociales que realizó durante su mandato que limitaban los poderes de los ciudadanos romanos propició que el Senado se planteara la forma de gobierno conveniente para la ciudad.

Entre 510 y 509 a.C. se produjo una etapa de transición tras la cual el Senado decidió que Roma jamás volvería a ser una monarquía. El poder recayó en su sobre el Senado, que ficticiamente lo repartió entre la población creando diversos puestos políticos denominados magistraturas, que en la realidad sólo podían ser ocupados por los patricios o clase alta romana.

Dentro del senado se escogía a dos líderes o Cónsules que serían las personas con mayor poder en la República, que sin embargo no podían tomar decisiones de forma separada. Los primeros dos Cónsules fueron Lucio Junio Bruto y Lucio Tarquinio Colatino los líderes de la revolución contra Tarquinio el Soberbio. Fue en este momento en el que se adoptó la expresión SPQR, Senatus Populusque Romanus “El senado y el pueblo romano” como lema de la república.


SOCIEDAD Y POLÍTICA EN LA REPÚBLICA ROMANA

Clases sociales

La sociedad romana durante la república se dividió en dos clases sociales de ciudadanos:
Patricios. Clase alta romana, descendientes de las familias fundadores de la ciudad. Disponían de muchos privilegios, puesto que eran los únicos que podían ocupar los cargos públicos, tanto en el senado como en las demás magistraturas.
Plebeyos. Pagaban numerosos impuestos y se les llamaba a formar filas del ejército cuando era necesario obligándoles a dejar sus tierras y sus cultivos y originando en ocasiones su ruina. Apenas tenían derechos políticos, únicamente se les permitía reunirse en asamblea una vez al año para elegir a los magistrados entre los candidatos patricios. Todos estos inconvenientes de su situación les llevaron a emprender diversas revueltas para reclamar más derechos.

Organización política

Numerosas instituciones y funcionarios que existieron durante la monarquía desaparecieron y otras se adaptaron para prestar mejor servicio al pueblo, distinguimos entre cuatro tipos de instituciones políticas

Los cónsules. El poder que hasta ahora recaía en la única figura del rey se repartió entre dos personas, los cónsules que se encargaban por lo tanto de dirigir Roma en la paz y en la guerra, convocar el senado y las asambleas y administrar justicia. Se escogían anualmente por medio de asambleas y se ejercían un control mutuo entre los dos elegidos.

El senado. Institución ya existente durante la monarquía, mantuvo sus atribuciones y se afianzó como órgano consejero del gobierno de la ciudad.

Las Asambleas. También llamadas comicios, las hay de tres tipos. Asamblea curial que reunía a grupos de 30 patricios, la asamblea centurial que se formaba por grupos de 100 ciudadanos de bajo sistema militar y la asamblea tribal, formada por la plebe agrupada en tribus que escogía a los tribunos de la Plebe. Cada uno de los comicios tenía una serie de competencias políticas.

Magistrados. Personas encargadas de llevar a cabo distintas tareas de administración de la república, escogidos en las asambleas, destacan los censores (contabilizaban la población y sus bienes), los cuestores (recaudaban impuestos), los pretores (administraban justicia) y los ediles (abastecimiento y conservación de la ciudad).

República Romana temprana (509-208 a.C.)

Con el establecimiento de este nuevo régimen de gobierno Roma quedaba gobernada principalmente por los patricios. La clase social baja, los denominados plebeyos únicamente podían votar una vez al año a ciertos magistrados patricios para que los representaran, pero no podían ser elegidos ciudadanos plebeyos. Estos enfurecidos por los elevados impuestos y la escasa consideración de la clase alta decidieron dejar de cultivar las tierras, de comerciar y de servir al ejército y se retiraron en masa a la colina del Aventino en el año 494 a.C.

Es lo que se conoce como la secesión del Aventino y gestación del conflicto que llevaría al final de la república. Los plebeyos exigían el reconocimiento de sus derechos y hasta que esto no se hiciera realidad no volverían a sus trabajos. Los patricios se vieron obligados a ceder ante las exigencias de la gran mayoría de la población romana y se decretó la creación de una nueva magistratura, los tribunos de la plebe. Magistrados que solo podían ser elegidos entre candidatos plebeyos y que defendían los intereses de esta clase social.

Ley de las Doce Tablas

La ley de las XII tablas o Ley de Igualdad romana es el reflejo de la victoria de las rebeliones de plebeyos sobre los patricios. Se trata de la primera ley escrita de roma. Recogía las normas que regulaban la convivencia del pueblo romano y las reglas para impartir justicia.

Los enfrentamientos entre patricios y plebeyos se extendieron durante cerca de medio siglo, cuando estos conflictos se estabilizaron y por fin concluyeron con la redacción de la Ley de las Doce Tablas, se alcanzó la paz interna en Roma. La República estaba política y socialmente controlada y militarmente preparada para comenzar su expansión. Esta época que comprende desde el inicio de la República hasta la consolidación de la nueva forma de gobierno y el inicio de la expansión de Roma es denominada República Romana temprana.

Expansión Territorial durante la República Romana temprana

Por medio de las guerras latinas, Roma consigue afianzar su poder en la zona del Lacio sometiendo a las tribus que habitaban en los alrededores de los dominios romanos. Los conflictos entre las tribus latinas aliadas y Roma duraron más de 150 años hasta que finalmente en el año 338 a. C. tras la decisiva batalla naval de Actium se pone fin a la guerra y Roma logra someter a las tribus aliadas.

Tras lograr el dominio de la zona del Lacio, Roma debió afrontar 3 nuevas guerras con otras poblaciones que ocupaban la península itálica, las denominadas guerras samnitas. Los principales enemigos de Roma en la península eran los samnitas que atacaban a Roma desde el sur. El enfrentamiento entre ellos tuvo episodios dominados por los samnitas como la victoria en Horcas Caudinas donde gran parte el ejército de Roma desarmado fue masacrado por los samnitas. Sin embargo la sorprendente determinación de las tropas romanas que jamás se rendían o retrocedían hizo posible la victoria romana sobre los samnitas en el año 290 a.C. dejando vía libre hacia el sur de Italia.

República Romana media (280-148 a.C.) – Guerras Púnicas

Aunque la expansión territorial dio comienzo durante la República Romana temprana, fue mucho más pronunciada durante República Romana media. Este periodo fue brillante desde el punto de vista militar, sin embargo la sociedad romana sobretodo hacia el final de esta etapa se tornó frágil e inestable, el número de esclavos y de plebeyos se multiplicaba año a año y los habitantes de los pueblos conquistados estaban cada vez más descontentos debido a las grandes exigencias de la capital en cuanto a impuestos, el pueblo deseaba igualdad entre los ciudadanos.

Tras lograr el dominio de la zona del Lacio, Roma debió afrontar 3 nuevas guerras con otras poblaciones que ocupaban la península itálica, las denominadas guerras samnitas. Los principales enemigos de Roma en la península eran los samnitas que atacaban a Roma desde el sur. El enfrentamiento entre ellos tuvo episodios dominados por los samnitas como la victoria en Horcas Caudinas donde gran parte el ejército de Roma desarmado fue masacrado por los samnitas. Sin embargo la sorprendente determinación de las tropas romanas que jamás se rendían o retrocedían hizo posible la victoria romana sobre los samnitas en el año 290 a.C. dejando vía libre hacia el sur de Italia.

República Romana media (280-148 a.C.) – Guerras Púnicas

Aunque la expansión territorial dio comienzo durante la República Romana temprana, fue mucho más pronunciada durante República Romana media. Este periodo fue brillante desde el punto de vista militar, sin embargo la sociedad romana sobretodo hacia el final de esta etapa se tornó frágil e inestable, el número de esclavos y de plebeyos se multiplicaba año a año y los habitantes de los pueblos conquistados estaban cada vez más descontentos debido a las grandes exigencias de la capital en cuanto a impuestos, el pueblo deseaba igualdad entre los ciudadanos.

Militarmente la República Romana media se vió marcada por el conflicto armado con Macedonia y sobretodo Cartago la gran potencia del mediterráneo. Roma una vez conseguido el dominio sobre la península itálica centro la mira sobre el mediterráneo y comenzó una serie de conflictos con Cartago denominados Guerras Púnicas. Estas guerras fueron en realidad 3 enfrentamientos.

Primera Guerra Púnica. Enfrentamiento entre romanos y cartagineses por el dominio de Sicilia que se decantó en favor de los primeros. Desarrollada entre 264 y 241 a. C.

segunda Guerra Púnica. Los cartagineses se expanden por la península ibérica hasta que llegan al límite marcado por los romanos en el río Ebro, atacan Sagunto, aliada romana y Roma les declara la guerra que se dividió en dos frentes. Por un lado la guerra en la península ibérica y por otro la heroica marcha del general cartaginés Aníbal a través de los Pirineos y los Alpes hasta llegar a las puertas de Roma. Por su parte el general romano Escipión venció a los cartagineses en Hispania y se dirigió hacia la capital Cartago. Finalmente la victoria cayó del lado romano. Desarrollada entre 218 y 201 a.C.

Tercera Guerra Púnica. Ataque de Roma a la capital cartaginesa. Derrota definitiva de Cartago, Roma se convierte en la principal potencia del Mediterráneo. Desarrollado entre 149 y 146 a.C.

República Romana tardía (148-27 a. C.) – Crisis

Tras hacerse con el dominio del Mediterráneo, Roma se expandió enormemente por toda la costa de este mar, creando lo que se denominó Marenostrum. Las legiones de la República arrollaron con facilidad a los pocos reinos que aun podían hacer frente a Roma, Turquía, Siria y Grecia. Con la conquista de esta última nación, Roma quedó fascinada por la política y cultura griegas y comenzó a exportarlas a la propia capital romana.

Roma una vez exportada la sabiduría y cultura griegas se había convertido en una verdadera potencia tanto económica como cultural, la república se encontraba en su momento de máximo esplendor. Sin embargo Roma era internamente frágil y en la sociedad se comenzaba a gestar un enorme descontento. Los cada vez más numerosos esclavos y la gran masa de plebeyos exigían más derechos y el reparto de las riquezas obtenidas de tierras conquistadas.

La política romana se encontraba dividida entre los partidarios de las nuevas ideas políticas democráticas provenientes de Grecia y los partidarios de la clásica forma de gobernar la República romana. Estos dos bandos se enfrentaron tras el conocido como conflicto de los Gracos, dos tribunos de la plebe que exigían una reforma agraria que beneficiara a los pobres y no a los terratenientes. Ambos fueron asesinados lo cual desembocó en la crisis del siglo I a. C., sucesivas Guerras Civiles y la creación de los triunviratos. Toda esta situación desembocó en el final de la República Romana.

EL IMPERIO ROMANO
El Imperio Romano es el periodo histórico que transcurre desde el 27 a. C. hasta la división en dos del país romano. El Imperio Romano de Occidente que dura hasta el 476 d. C. y el Imperio Romano de Oriente o Imperio Bizantino que se extiende hasta el 1453 d. C. Como se pasó de la República Romana al Imperio Romano, distinción entre Alto y Bajo Imperio Romano según el esplendor del país. Causas del fin del Imperio Romano.

Tras el asesinato de Julio César el 44 a.C. Marco Antonio parecía el sucesor natural sin embargo César dejó como único heredero a su sobrino Octavio de tan solo 18 años que a ojos del César tenía las cualidades necesarias para gobernar Roma. Marco Antonio y Octavio formaron junto a Lépido el Segundo Triunvirato, gobernaron conjuntamente la República durante más de 10 años.

En el año 31 a.C. Octavio con el apoyo de nobleza, proletariado y las legiones romanas se enfrentó a Lépido y Marco Antonio venciendo a ambos y convirtiéndose en el principal líder de Roma.

Transición de República a Imperio

Con la victoria en la batalla de Accio, Octavio derrota a Marco Antonio y anexiona los territorios de Egipto, que hasta ahora habían estado en propiedad de Cleopatra, a Roma. Comienza entonces un periodo de ficticia estabilidad en el cual Octavio va construyendo poco a poco una nueva forma de gobierno, el imperio.

Con su llegada al poder comenzó a realizar reformas lentas y espaciadas que prometían mejorar el funcionamiento de la República. Octavio era un hombre astuto e inteligente además de gran orador, fingió una retirada de la vida pública, tras ella el pueblo romano unido (tanto nobleza como proletariado) cansados de las interminables guerras civiles concedieron todo su apoyo a Octavio que ofrecía paz a cambio del poder absoluto de Roma.

Así, en el año 27 a.C. el Senado condecora a Octavio con el título de Augusto o “divino” y lo nombra Imperator Caesar Augustus que significaba comandante de todos los ejércitos. Esta es la fecha en la que se suele fijar el inicio del Imperio Romano sin embargo lo que da comienzo es una lenta pero magnífica transición llevada a cabo por Octavio a esta nueva forma de gobierno.

Edad Dorada

Con el nombramiento de Emperador de Octavio César Augusto en el año 27 a.C. da comienzo una época de paz y prosperidad para el pueblo romano. Durante su gobierno, que duró más de 40 años Octavio jamás aceptó el poder absoluto pero de hecho sí que lo ejerció, puesto que aunque mantuvo las instituciones de la república, las controlaba a su antojo.

Con Octavio César Augusto se logró la ansiada Pax Romana en el Mediterráneo, se llevaron a cabo innumerables reformas administrativas que hicieron más eficiente el control de todas las provincias convirtiendo el nuevo régimen de gobierno, en una estructura sólida

Imperio Romano

Tras el asesinato de Julio César el 44 a.C. Marco Antonio parecía el sucesor natural sin embargo César dejó como único heredero a su sobrino Octavio de tan solo 18 años que a ojos del César tenía las cualidades necesarias para gobernar Roma. Marco Antonio y Octavio formaron junto a Lépido el Segundo Triunvirato, gobernaron conjuntamente la República durante más de 10 años.

En el año 31 a.C. Octavio con el apoyo de nobleza, proletariado y las legiones romanas se enfrentó a Lépido y Marco Antonio venciendo a ambos y convirtiéndose en el principal líder de Roma.

Transición de República a Imperio

Con la victoria en la batalla de Accio, Octavio derrota a Marco Antonio y anexiona los territorios de Egipto, que hasta ahora habían estado en propiedad de Cleopatra, a Roma. Comienza entonces un periodo de ficticia estabilidad en el cual Octavio va construyendo poco a poco una nueva forma de gobierno, el imperio.

Con su llegada al poder comenzó a realizar reformas lentas y espaciadas que prometían mejorar el funcionamiento de la República. Octavio era un hombre astuto e inteligente además de gran orador, fingió una retirada de la vida pública, tras ella el pueblo romano unido (tanto nobleza como proletariado) cansados de las interminables guerras civiles concedieron todo su apoyo a Octavio que ofrecía paz a cambio del poder absoluto de Roma.

Así, en el año 27 a. C. el Senado condecora a Octavio con el título de Augusto o “divino” y lo nombra Imperator Caesar Augustus que significaba comandante de todos los ejércitos. Esta es la fecha en la que se suele fijar el inicio del Imperio Romano sin embargo lo que da comienzo es una lenta pero magnífica transición llevada a cabo por Octavio a esta nueva forma de gobierno.

Edad Dorada

Con el nombramiento de Emperador de Octavio César Augusto en el año 27 a.C. da comienzo una época de paz y prosperidad para el pueblo romano. Durante su gobierno, que duró más de 40 años Octavio jamás aceptó el poder absoluto pero de hecho sí que lo ejerció, puesto que aunque mantuvo las instituciones de la república, las controlaba a su antojo.

Con Octavio César Augusto se logró la ansiada Pax Romana en el Mediterráneo, se llevaron a cabo innumerables reformas administrativas que hicieron más eficiente el control de todas las provincias convirtiendo el nuevo régimen de gobierno, en una estructura sólida que se mostraba eficaz cuando la lideraba un emperador hábil como Augusto.
Militarmente Augusto marcó cuales debían ser las fronteras del Imperio en el norte. Del mismo modo consiguió anexionarse Germania Magna expandiendo el territorio romano hasta el río Elba sin embargo se perdió parte de estas tierras quedando el límite germánico establecido en el Rin. Asimismo se concluyó la conquista de Hispania.

Culturalmente Roma evolucionó enormemente, la influencia e importaciones de Grecia incrementaron el número de esculturas y edificios arquitectónicos y muchos historiadores consideraron esta como una edad dorada tanto social como política y culturalmente.

Grandes dinastías del Imperio Romano

Durante la época imperial se sucedieron las dinastías de emperadores, este era un puesto hereditario por lo que los cambios de dinastía solo se daban a través de levantamientos, los sobornos y los asesinatos eran una constante en la política imperial. Repasamos las cuatro grandes dinastías de emperadores que gobernaron Roma durante el periodo del Alto Imperio Romano.

La dinastía Julio-Claudia. Fueron los emperadores de Roma desde el 27 a.C. hasta el 69 d.C. Octavio Augusto fue el primero de los emperadores de esta dinastía, el más destacado y dotado para el gobierno de Roma. Sus sucesores no mostraron la misma valía, los más destacados fueron Tiberio, Calígula y Nerón, pero no en cuanto a sus logros y buen hacer, sino debido al despotismo con el que gobernaron. El sistema dinástico hereditario puso a prueba la solidez del imperio creado por Octavio.

La dinastía Flavia. Grandes administradores y constructores, gobernaron Roma desde el 69 hasta el 96 d.C. lograron mantener las fronteras protegidas y mejoraron las condiciones de vida y derechos de los habitantes de las provincias. Destacan Vespasiano que realizó una serie de reformas financieras para mejorar la situación tras los derroches de la dinastía anterior, Tito y su hermano menor Domiciano. Durante los años en los que la dinastía Flavia gobernó se produjo la crisis del Año de los Cuatro Emperadores, durante este periodo además se realizó la construcción del Anfiteatro Flavio o Colosseum.

La Dinastía Antonina. Gobernó desde el 96 hasta el 180 y durante ese periodo gobernaron Los Cinco Buenos Emperadores: Nerva, Trajano, Adriano, Antonino Pío y Marco Aurelio. Consolidaron y expandieron hasta su culmen los territorios romanos, construyeron grandes monumentos y edificios en el centro de Roma (columnas, foros, iglesias…) restos de los cuales todavía hoy perduran. Durante el gobierno de los 5 buenos emperadores se produjo la Edad De Oro del Imperio Romano.

La Dinastía Severa. Tras la muerte de Cómodo, hijo de Marco Aurelio, hubo un periodo de transición tras el cual, gobernó en Roma la primera dinastía de emperadores provenientes de África entre 193 y 235. Septimio Severo, Caracalla o Alejandro Severo fueron algunos de los emperadores más destacados de este periodo.

Tras la dinastía Severa se produjo la crisis del siglo III y se sucedieron diferentes dinastías de emperadores que sin embargo, no lograron devolver a Roma a la Edad de Oro del Siglo II.
Sociedad en el Imperio Romano
Durante la República Romana, la sociedad estaba dividida en tres grandes grupos: los patricios clase alta y poseedora de todos los privilegios, los plebeyos constituido por el pueblo proletario con derechos limitados y los esclavos posesión de los patricios sin derechos ni privilegios. Los plebeyos más adinerados se juntaron con una facción de los patricios formando una nueva clase denominada optimates en el siglo IV a.C.

Tras la llegada de Octavio Augusto al poder, la sociedad romana se vio alterada, aunque se mantuvieron esencialmente los tres grandes grupos sociales, la sociedad evolucionó dando lugar a nuevos o transformando los ya existentes.

Caballeros. También denominada orden ecuestre, se trataba del conjunto de empresarios, prestamistas, comerciantes y demás personas que se habían hecho ricas con algún tipo de negocio.

Proletariado. Los campesinos de la antigua clase media romana, propietarios de pequeñas superficies de cultivo nada podían hacer contra los latifundios de los terratenientes patricios. Abandonaron sus cultivos y se emigraron a Roma y otras grandes ciudades del Imperio. Se trataba de una masa ociosa y viciosa clientela de los políticos que trataban de convencerles para conseguir sus votos.

División del Imperio Romano – Crisis Imperial

Tras el asesinato a manos de sus soldados del emperador Alejandro Severo en el año 235 y hasta el ascenso de Diocleciano en el año 285, se produjo un periodo de crisis anárquica en Roma. Este periodo de crisis profunda tanto desde el punto de vista político como económico y social se puede dividir en dos fases:

Anarquía Militar – 235-268. Tras la muerte de Alejandro Severo existe un vacío de poder en el Imperio, los principales generales pugnan por convertirse en emperador y el territorio romano es tan vasto que difícilmente es controlable por emperadores efímeros. Galia, Hispania y Britania se separan y los pueblos germánicos o bárbaros atacan desde el norte provocando parciales desmembramientos del imperio. En 268 se produjo un punto de inflexión, la invasión bárbara de los godos que fueron derrotados en la batalla de Naissus. Dio comienzo la época de los emperadores ilirios.

Emperadores ilirios – 268-284. La seguridad e integridad del imperio se había puesto en duda durante los años anteriores. Se hicieron con el poder emperadores de origen ilírico que habían evitado las invasiones bárbaras y lograron reunificar el imperio y restablecer la situación. Con el nombramiento de Diocleciano se da por finalizada la crisis imperial y da comienzo el Bajo Imperio Romano.

Para el año 285 d. C. el emperador Diocleciano decidió entonces dividir el imperio en dos mitades, con el Imperio de Oriente gobernado desde Bizancio (posteriormente Constantinopla) y el Imperio de Occidente, gobernado desde Roma. Ambas secciones eran conocidas indistintamente como “El Imperio Romano”, aunque con el tiempo, el lado Oriental adoptaría el idioma griego, en lugar del latino, y perdería también algunos rasgos del espíritu distintivo de los romanos.

Las dos mitades del imperio continuaron prosperando en igualdad de condiciones hasta la llegada del reinado del emperador Teodosio I (379–395 d.C.), cuando causas internas y externas condujeron a la separación de los dos imperios.

MAPA IMPERIO ROMANO MÁXIMA EXTENSIÓN